viernes, 18 de julio de 2008

UASD aumenta nómina, pese al déficit millonario que dice tener


SD. Al tiempo que las autoridades de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) disponen medidas de control para enfrentar el déficit de más de RD$300 millones que afecta a la academia, realizan decenas de nuevos nombramientos que lo justifican bajo el término de mantener la "gobernabilidad".
Fuentes confiables aseguran que suman más de 50 los nombramientos y que éstos abarcan desde seguridad hasta subdirecciones.
No obstante, fuentes oficiales aseguran que no pasan de tres los puestos de subdirecciones y que éstos consisten en reclasificaciones de cargos de algunos empleados con más de 20 de servicio en la institución. Tal es el caso de Bertha A. Lora Brito que de supervisora general de Registro fue ascendida a subdirectora.
Lora Brito tiene más de 25 años de labor en la UASD con un salario mensual de RD$42,614, según consta en la nómina de la institución y que está publicada en la página electrónica, el cual fue incrementado a RD$52,614, porque la reclasificación implica un incentivo de RD$10,000.
"Lo que ha hecho la universidad es un acto de justicia con empleados que tienen mucho tiempo sirviendo a la institución y que no habían sido tomados en cuenta", apuntó una fuente de la UASD que pidió no ser identificado, por no estar autorizado.
El rector de la UASD, Franklin García Fermín, es el que está facultado para hablar del tema, pero está fuera del país.
Algunas de las autoridades académicas insisten en que no ha habido una entrada masiva de nuevos empleados, sino algunos para responder a los grupos que apoyaron la candidatura de las actuales autoridades, y que eso en nada altera la nómina de la casa de estudios.
Atribuyen la denuncia a una rebatiña de grupos que perdieron las pasadas elecciones y que mantienen una actitud de supuesta beligerancia ante las nuevas autoridades.
A la rectoría le han sacado en cara el nombramiento de más de 24 funcionarios mediante la creación de cuatro comisiones de seis miembros cada una y decenas de las llamadas botellas.
De ahí que personas como el profesor Facundo Acosta, creen que la congelación de la nómina no tiene sentido, porque ya está muy abultada.

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